Entendemos por fase topológica a aquel momento de la lucha de clases en el que los sujetos activos, o sea, la totalidad del cuerpo social, se ven obligados a tomar posiciones, tanto de forma activa como pasiva (tanto da el dejarte llevar que el ir por tu cuenta). La fase topológica no es más que un movimiento de organización de las fuerzas, de evaluación de posibilidades, que se inicia cuando alguien o algo irrumpe en el devenir continuo de la sociedad. En ese momento, “momento de verdad” según nuestra terminología, se produce una especie de fisura, de irregularidad, que pone a prueba el valor de las categorías en uso incorporando una nueva perspectiva que será, o no será, la que inicie el proceso de lo que llamamos transición ideológica. La fase topológica, en definitiva, coloca a cada uno en su sitio. Queramos o no queramos, en la lucha de clases no existen “metaposiciones”: o estás conmigo o estás contra mi. Por lo tanto, en toda fase activa de la lucha de clas...
Y mi amor fue tomando forma, igual que una sonrisa tímida.