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Mostrando entradas de julio, 2014

De la forma sonata a Stalin, pasando por la fuente de Duchamp

Dice el Marcuse de Contrarrevolución y Revuelta que la obra de arte transforma un contenido particular, individual, en el orden social universal en que existe [1] . Podemos decir, pues, con Marcuse, que la misma estructura de la obra de arte, en este caso, la forma sonata, es fiel reflejo de cómo se ve la propia sociedad a sí misma, en este caso, la sociedad burguesa dieciochesca. En la forma sonata se reflejan los patrones de conducta mediante los cuales la burguesía, y no sólo la burguesía, se enfrentaba al mundo. Analicemos la forma sonata y tratemos de acoplar esos patrones:          La forma sonata es una forma tripartita más o menos elaborada que suele esquematizarse de esta manera A-B-A', en las que esas tres secciones pasan a llamarse: exposición, desarrollo y re-exposición. Es el mismo esquema o estructura argumental de los géneros narrativos: introducción, nudo y desenlace. 1.     Exposición : en cierto modo esta sección nos enseña como se ve la propia socieda

La Sinfonía nº 7... “Leningrado”... y 11

En el contexto anterior, la Sinfonía nº 7 , subtitulada “Leningrado”, en las manos de Stalin y su aparato político, se convirtió pronto en un revulsivo importante, no sólo para ayudar al pueblo a aguantar el horror del hambre y las bombas sino para demostrar a todo el mundo la tenacidad y grandeza del nuevo hombre soviético. Es famosa la imagen de la revista Times donde aparece Shostakovich con el traje de bombero, representando al artista soviético comprometido. De hecho, reforzando ese compromiso entendemos las siguientes palabras del propio compositor que, en cierto modo, parece dejarse llevar por la inexorabilidad de los acontecimientos: Shostakovich addressed the audience, live and radio, before the performance, explaining how he came to write the piece, describing its character and content. In an inspirational article published in Pravda three weeks later, he reinforced the deeply patriotic impulse behind his Seventh Symphony: “The war we are fighting against Hitler is an

Nuevos programas, nuevos quehaceres… el sitio de Leningrado... 10

Evidentemente, con el cambio de paisaje, cada uno de los elementos trató de acoplarse lo mejor que pudo. El propio Stalin, que sabía perfectamente del poderoso potencial propagandístico de la cultura, no tardó en ponerlo en marcha. En una guerra como la que estaba librando, no podía seguir enviando a Siberia a los artistas, todos podían servir para levantar la moral del pueblo. Así, a pesar del acoso al que Shostakovich se había visto sometido por el régimen stalinista en los años anteriores, los líderes políticos no tardaron en utilizar su figura para ayudar a la población a aguantar el horror del hambre y las bombas. Así, el 1 de septiembre Shostakovich habló en Radio Leningrado durante el sitio de la misma ciudad: “Hace tan solo una hora he terminado la partitura del segundo movimiento de mi sinfonía. ¿Por qué os lo cuento? Para que los que me estéis escuchando sepáis que la vida de nuestra ciudad continúa con normalidad” [1] Pero Shostakovich era una personalidad tan valios