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Mostrando entradas de noviembre, 2015

En torno a... "El Jugador" de Fiódor Dostoievski

Quizás unos de los ejemplos que plasman de una manera realista lo que hemos trabajado en torno a la novela El Proceso y la película El Ángel Exterminador sea el de El Jugador . El jugador de ruleta muestra una fe ciega en la ley objetiva, implacable y descarnada del juego a la hora de enfrentarse a sus problemas, a sus cuestiones vitales y personales. Por otro lado, el atractivo de la ley es precisamente ese, como fuerza objetiva, desubjetivizada, siempre abriga en el sujeto la esperanza (tengo la corazonada- diría el jugador) de que la ley, las reglas del juego, siempre pueden ser dominadas a su favor. Pero eso es siempre una proyección que realiza el sujeto. El sujeto subjetiviza la ley, la hace suya, pero la llena de sus propios contenidos a través de su subjetividad, y si éste sujeto no asume el problema que le atenaza, la ley lo único que hace es reflejar esa imposibilidad, pero ya de una manera objetiva, implacable y mortal. Otro aspecto importante que

Izquierda y derecha... un acercamiento estructural

Desde nuestra posición que viene plasmada en el sujeto entendido como encarnación de una contradicción fundamental (comunidad/ley), el problema ya manido, en cierto modo en desuso, de la izquierda y la derecha adquiere un nuevo sentido. Entendemos, pues, que los términos derecha e izquierda remiten a diferentes modos de enfrentarse al problema que acarrea la diferencia misma, la contradicción fundamental. Por un lado, el de derecha, que mira desde el lado de la comunidad (no es casual que se autodefina como un defensor de la unidad de la nación), se sumerge en esta comunidad a través del prisma de la ley (de la universalidad) y la ve como una unidad armónica y orgánica. Por otro lado, el de izquierda, que mira desde el lado de la ley (no es casual que se autodefina como un defensor de la legalidad), se sumerge en esta legalidad a través del prisma de la comunidad (de la singularidad) y la ve como pluralidad. Desde el punto de vista de la relación entre ambo

En torno a... "El Proceso" de Franz Kafka... y 4

4. El Abate y la culpa Desde el punto de vista ontológico, ya hemos dicho que el sujeto, por el hecho de ser un hombre de carne y hueso, carga con una culpa primordial que venimos en llamar “pecado original”. Pero sería interesante descubrir cual es la relación del pecado original con la ley. Desde nuestro punto de vista, culpa y ley son dos caras de la misma moneda, de tal manera que, tanto lo uno como lo otro, no pueden ser dichos sin su contrario. El hombre, menesteroso por naturaleza, necesita la ley, y esa ley es fruto de su menesterosidad, de su pecado. Y como ese pecado está encarnado en el hombre de carne y hueso, evidentemente, la puerta de la ley es una puerta hecha para el propio sujeto, es una puerta personal. Y así es como el guardián de la puerta se dirige al hombre que quería traspasar el umbral de esa puerta: “esta entrada sólo está hecha para ti”. Por tanto, todo sujeto carga con su puerta, carga con su culpa. Pero todo esto, cuando hablamos de que cada suje

En torno a... "El Proceso" de Franz Kafka... 3

  3. Titorelli y la absolución Por lo dicho, la absolución, o sea, la remisión de los pecados, también se situaría en diferentes estratos del ser. Así, encontraríamos dos tipos de absoluciones, la real, la que tiene que ver con el pecado original, y la aparente, que tendría que ver con los pecados vinculados a un conjunto de categorías y valores concretos. Y así es como se le hace saber Titorelli a K..., pero no sólo eso, también le ofrece otra posibilidad, la prórroga ilimitada. Pasamos a referirnos a cada una ellas. En cuanto a la absolución real, no hay nada ni nadie que pueda determinarla. Se basa exclusivamente en la inocencia del acusado, es la única que puede provocarla. Evidentemente, hablamos de un tipo de absolución imposible en la medida de que el sujeto, desde el punto de vista ontológico, es un ser ya marcado por el pecado. Es por ello que sólo pase por el propio sujeto. En ese sentido, porque sólo la inocencia del sujeto puede determinarla, cualquier ay

En torno a... "El Proceso" de Franz Kafka... 2

2. Leni y la confesión El objetivo de toda confesión es el redención de los pecados. El sujeto, pecador, con la confesión, trata de liberarse del espectro que le persigue a raíz de sus errores, de sus pecados. Y pecados, tal como hemos puesto de manifiesto en la última entrada dedicada a La Agonía del Cristianismo de Unamuno, también se insertan en los diferentes estratos del Ser. En el nivel ontológico se situaría el pecado original, mientras que en los estratos simbólico e ideológico se situarían los pecados que tienen que ver con los valores y las categorías que son hegemónicas en un determinado momento histórico y, por lo tanto, no son primordiales, esenciales, sino, en cierto modo, relativos a esos valores y categorías hegemónicas. En el nivel ontológico el pecado no tiene que ver con ningún tipo de causalidad, es decir, el hombre ya nace con el pecado a cuestas, mientras que en los otros niveles, en la medida de que intervienen unas categorías y valores co

En torno a... "El Proceso" de Franz Kafka... 1

--> 1. ¿Quién es el tribunal?, ¿quién es el juez?, ¿cuáles son los cargos?... Son las preguntas que nos pueden asaltar a lo largo de la lectura de esta novela. Preguntas, evidentemente, que se convierten en retóricas una vez que culmina, porque el juez, el tribunal y los cargos ya parecían estar inscritos en el propio K..., el sujeto protagonista. Y es que, tal como venimos diciendo en otros contextos, el hombre se halla marcado desde un principio, desde su nacimiento. Sólo que no se es consciente de esa marca hasta que llega el momento de la detención inexplicable, todo sea dicho. Y es esa marca, la que apremia a la conciencia, la que ejercerá de fuerza rectora de la novela. ¿En qué sentido esa marca o fisura, ese algo que no tiene historia porque ya está inscrito en el propio ser, puede regular una trama de carácter histórico lineal? Debemos de tener en cuenta que en el ser humano podemos descubrir dos niveles o estratos en su darse como sujeto real: el ontológ

En torno a... "La Agonía del Cristianismo"... y 5

5. El pecado Y nos embarcamos en nuevos problemas al intentar resolver esa contradicción, resolverla en el sentido de eliminarla. Pero, ¿qué sería del hombre sin esa contradicción? Ciertamente, el hombre, desde el punto de vista ontológico, es un ser contradictorio, es decir, marcado por el pecado original, por esa fisura, grieta. El hombre es un ser que lleva inscrita su falta, y esa falta es la condición de su propia libertad. Es el precio de la manzana del conocimiento. A partir de esa contradicción fundamental, la que es capaz de iniciar esa tendencia en el hombre, ese progreso, ese movimiento de la vida en el que nos vemos inmersos, aparecen otras contradicciones relativas a su praxis, es decir, que tienen que ver con las decisiones que el propio sujeto toma a la hora de enfrentarse a los problemas que le toca vivir. En este sentido, si, tan como hemos advertido en la entrada anterior, esa contradicción fundamental genera dos tipos de fuerzas o tendencias en e

En torno a... "La Agonía del Cristianismo"... 4

4. La tendencia Los dos polos contradictorios (comunidad y legalidad) no pueden ser entendidos como lugares quietos, cosificados, sino como fuerzas, como movimientos, como tendencias que diría Lenin. La comunidad sería la tendencia de la singularidad, de la carne, hacia la universalidad, mientras que la ley es la tendencia de la universalidad, del espíritu, hacia la singularidad. Esas tendencias, utilizando terminología de Lukács, se encarnaría en la particularidad del sujeto. En palabras de Unamuno, “en la comunidad hay más bien ganas de creer, (…) las ganas de creer sale de la carne, y a la vez hay que engendrar hijos de espíritu: hablamos de dos sobreviviencias contradictorias entre sí”. La carne tiene necesidad de creer, necesidad de la idea, de universalidad, mientras que el espíritu tiene necesidad de engendrar, necesidad de hijos, de singularidad. Es fácil, por tanto, distinguir entre el carácter viril de la carne y el carácter femenino del espíritu. Por todo eso, para Un

En torno a... "La Agonía del Cristianismo"... 3

3. La encarnación Sin duda uno de los pasajes más bellos de La Agonía del Cristianismo se encuentra en el cuarto capítulo, “ Abisag, la sunamita” . En él se muestra el carácter de los polos en contradicción y a la vez su encarnación en un sólo hombre, en el sujeto decimos nosotros, el rey David. Si bien Abisag representa la comunidad, Salomón, el hijo de David, representa la ley objetivada. Estas dos dimensiones están mediadas por la figura de David, la ley viva. No es de extrañar que para Unamuno, “David ha sido para los cristianos uno de los símbolos, una de las prefiguraciones del Dios-Hombre, del Cristo” 1 . Si David ama a su pueblo y no puede conocerlo, Abisag ama a su Dios pero no puede mantenerlo con vida. Fruto del pecado de David nace Salomón, la ley objetivada, el hijo del pecado, hijo de la carne, el que nace fuera de la ley. Sólo fuera de la ley se consigue mediar entre las dos dimensiones (la ley y la comunidad). En el momento en el que se introdu

En torno a... "La Agonía del Cristianismo"... 2

2. La contradicción Pero, ¿qué elementos entran en lucha agónica en el propio Cristo? Son dos: el elemento judaico (la esperanza judaica, la inmortalidad de la carne), y el elemento helénico (la espiritualidad, la inmortalidad del alma). Y aquí podemos trazar cierto paralelismo sobre lo que nosotros venimos diciendo. Ciertamente, el elemento judaico haría referencia a nuestro polo comunitario, de la singularidad, mientras que el elemento helénico se situaría en ámbito de la ley, de lo ideal, de la universalidad. “ Y ese gran dogma de la resurrección de la carne a la judaica [de esa comunidad de carne y hueso que perdura a través de los siglos] y de la inmortalidad del alma a la helénica [de la ley, del logos que se halla más allá del mundo corruptible] nació la agonía en San Pablo, un judío helenizado, un fariseo que tartamudeaba su poderoso griego polémico” 1 . Y en el momento en el que hablamos de esas dos dimensiones en agónica disputa, nos sumergimos en el p

En torno a... "La Agonía del Cristianismo" de Miguel de Unamuno... 1

1. Prolegómenos Hoy en día el título de un libro como “La agonía del cristianismo” nos puede llevar a pensar que el cristianismo, como confesión, está perdiendo, poco a poco, su legitimidad como faro a través del cual la persona se guía en su vida ética y moral. Cierto es. Asistimos en nuestro mundo “culto” occidental a un proceso cada vez más exacerbado de secularización basado en la pura exaltación de la razón. La fe, tan importante otrora, queda relegada a los ambientes privados, yo diría domésticos, disgregada en las tareas específicas de cada uno de los individuos, lo que conlleva aparejado la pérdida de ese carácter universal que abrigaba a toda una comunidad, la que sea. En este sentido, la agonía está relacionada con la cercanía de la muerte, con esa lucha que se libra en los últimos días cuando ya parece estar todo perdido, y el título de este libro nos hablaría de los últimos coletazos del cristianismo como confesión. Pero es necesario darle una mayor am

En torno a... "El Ángel Exterminador" de Luis Buñuel

            Quizás una de las películas que puede mostrar con más claridad, desde el punto de vista estético, la apropiación de la ley que realiza el sujeto es El Ángel Exterminador de Luis Buñuel. Ya hemos referido en otro lugar sobre la apropiación que se realiza a partir del plusvalor de la ley. ¿Qué aporta la ley? Seguridad a los sujetos que se hallan inmersos en un cuerpo social. Pero ese plusvalor, que pasa por el sujeto, como encarnación de esa contradicción básica que es la polaridad comunidad/legalidad, puede no ser revertido al cuerpo social y verse así acumulado en el propio sujeto en forma de exceso de fuerza de la ley. Sin duda, para un cineasta como Buñuel, la clase social que encarna ese tipo de apropiación de la legalidad que no revierte en la comunidad es la burguesía. Pero, más allá de que sea o no acertada la visión de Don Luis, demos paso, con la ayuda de wikipedia, a la sinopsis de la película y tratar de aportar alguna idea al respecto: “Un grupo de burgueses

Kameraden... A propósito de una entrada de Isidoro Villena Reinoso

Estimado lector: Esta entrada es larga. Por lo demás, es un comentario a una reseña de mi amigo Isidoro Villena. Como es evidente, lo suyo es leer antes la reseña, pero no obligado: http://isidorovr.blogspot.com.es/2015/10/kameraden-die-wehrmacht-von-innen.html Según se desprende de tus palabras, el gran atractivo del libro es la perspectiva que adopta el autor : bucea en las entrañas del soldado alemán en la Segunda Guerra Mundial. El centrarse en el propio sujeto que interviene en la guerra, plantea ciertos aspectos muy interesantes. Supongo que el hecho de que el libro nace a partir de las conversaciones de los propios soldados, conversaciones que tratan de ellos mismos, y no precisamente de cuestiones “objetivas”, como órdenes, mapas, movimientos de tropas, estadísticas, etc. da pie a ello. Desde este punto de vista, evidentemente, tal como hoy en día se sabe en relación al estudio de la luz, que, mientras tratamos de estudiarla como si fuera de naturaleza corpuscula